Por Jose Ángel Planillo
Ayuntamientos, bibliotecas, hospitales o centros de salud son, entre otros, los lugares donde han sido distribuidos una amplia colección de títulos publicados, en valenciano, por la Editorial Bromera para, por un lado, amenizar los tiempos muertos, y por otro, promover la lectura y la lengua valenciana.
A esta colección pertenece la obra de Enric Senabre titulada El Despertar, un relato que trata de cómo una madre soltera busca reconciliar un trabajo que le produce pocas satisfacciones, con la crianza de una hija adolescente de la que nota que se va distanciando poco a poco.
Para tratar de buscar una forma de acercarse, y observando cómo la menor no presta atención a los estudios que su madre no pudo cursar, decidirá emprender una nueva oportunidad académica y vital para por un lado demostrarse a si misma que es posible labrarse un futuro si se le pone ganas, y por otro, encontrar puntos en común con su hija con los que estabilizar una relación tan complicada en ese momento de la vida.
Una lectura amena de un libro pensado para el fin de la campaña: entretener mientras se espera y, por qué no, darnos qué pensar en cómo podemos, si nos lo proponemos, cambiar no solo nuestras vidas llenándolas de cultura y aprendizaje, sino la de aquellos más cercanos si logramos establecer unos puntos de unión y no de distanciamiento en esta sociedad cada vez más ensimismada, autoexcluida y con el malhumor e intolerancia como banderas.
Desde aquí, mi más sincera enhorabuena por la campaña, que también podrían trasladar a los centros de Transfusión de Sangre, para obsequiar a los donantes con lecturas mientras esperan pacientemente a aportar su granito de solidaridad.
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