Por Jose Ángel Planillo
Al saber que no existe, que es falso, no me genera los sentimientos que tratan de despertar en el lector sus autores. Y mira que hay un buen elenco entre los que dieron cuerpo a esta antología "Herederos de Cthulhu", como Sergio Mars, Aída Albiar García, J.J. Arnau (coordinador), León Arsenal, J. E. Álamo y tantos otros... que se presentó por estas fechas hace 5 años. Pero ninguno ha logrado despertar el mínimo temor que se supone genera esta criatura mitológica y cosmológica creada por Howard Phillips Lovecraft, que tanto ha dado de sí a la literatura.
Y eso que en su contraportada se lee:
Podríamos decir que, además del padre, Howard Phillips Lovecraft fue el ideólogo de los Mitos de Cthulhu, con cuyos cuentos comenzó a explorar el terror primigenio llegado del cosmos como eje de los mismos. En esta antología, muchas décadas después, un grupo de autores españoles nos ofrecen sus propias exploraciones de los Mitos de Cthulhu.
Aquí, encontraremos a escritores que han frecuentado de manera asidua los Mitos junto a otros que los abordan por primera vez. Leeremos relatos ajustados al canon de los Mitos, otros más fronterizos y algunos experimentales. Los hay de terror puro, homenajes, humor y hasta alguna parodia. Los autores noveles se mezclan con otros muy veteranos, y los cuentos de manera expresa para la antología lo hacen con otros que ya fueron publicados hace años.
Todos juntos, nos dan una panorámica bastante ajustada —aunque, como siempre, incompleta— del influjo que los Mitos de Cthulhu han tenido y tienen en los escritores de fantástico español.
Sin embargo, como decía, esta obra no me ha causado miedo ni terror alguno. Pero como todo, una vez al año no hace daño, y hay que leer de todo para conocer nuevos horizontes narrativos.
Eso sí, he encontrado relatos muy buenos, que se me han resultado cortos y podrían dar para más. Otros que han rizado la historia para crear lugares, templos, ritos o sociedades donde se rinde culto a estos seres Primigenios, que merecen cierta atención. Y alguno que ha logrado darle una versión humorística a algo deleznable amparándose en ese miedo a lo oculto.
Me quedo con tres relatos: "Origen", de Sonia Córdoba y Alberto Valverde, que logran intrigar al lector durante su largo relato ambientado en un relato casi de novela negra o de espionaje; "Advenimiento", de Pablo García Naranjo, que también usa un recurso de novela policiaca en su relato para desvelar un crimen... pero con un final inesperado; y el de Aída Albiar García, donde en "La hermandad del umbral de la vida" nos habla de los ritos iniciáticos de una secta instalada en una isla solitaria, y de la rebeldía de una de sus acólitas, que recibirá un apoyo inesperado y tendrá un giro sorprendente.
Fuera de eso, supongo que a los amantes del género les encantará cómo han exprimido las situaciones para dar vida y cabida a Cthulhu y resto de personajes de Lovecraft.
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